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La firma de hipotecas para comprar viviendas ha experimentado una desaceleración en los últimos dos años, correlacionada con el aumento de los tipos de interés. Esta situación ha llevado a menos residentes de Córdoba a buscar financiamiento bancario para adquirir propiedades, según revela un informe reciente del Instituto Nacional de Estadística.
Durante el año pasado, se registraron un total de 7.234 préstamos hipotecarios, mostrando una disminución en comparación con años anteriores (8.579 en el año anterior y 8.972 en 2021). El año 2021 marcó el pico más alto de hipotecas en la provincia en los últimos cinco años, y desde entonces ha habido una disminución cercana al 20 por ciento.
La mayoría de estos préstamos fueron firmados con bancos, alcanzando un total de 6.298, mientras que el resto, 936, fueron suscritos con otras entidades financieras.
En términos mensuales, diciembre resultó ser un mes desafiante para la firma de hipotecas en Córdoba, con solo 429 contratos firmados, una de las cifras más bajas del año. Esta cantidad representa casi la mitad de lo registrado el mes anterior, noviembre, que alcanzó las 793 hipotecas, la segunda cifra más alta del año después de febrero (816).
A pesar de la disminución en la firma de hipotecas, el sector inmobiliario y de la construcción sigue mostrando fortaleza. El presidente de la patronal Construcor, Francisco Carmona, interpreta este descenso como una señal positiva de la solidez del mercado inmobiliario en Córdoba y su provincia, especialmente en la capital. Carmona señala que aunque la demanda de viviendas sigue siendo alta, los compradores están optando cada vez más por utilizar sus propios recursos y ahorros en lugar de recurrir a préstamos bancarios.
Según datos de la patronal Construcor, el 30 por ciento de las viviendas adquiridas el año pasado se compraron sin financiamiento hipotecario, en comparación con el 20 por ciento del año anterior. Carmona atribuye este cambio a la incertidumbre económica que se vivió en la segunda mitad de 2022, debido al aumento de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo para combatir la inflación.
En cuanto al tipo de préstamos, la mayoría durante 2022 y la primera mitad de 2023 fueron a tipo fijo, anticipándose al aumento del costo del dinero. Sin embargo, esta tendencia ha cambiado en la segunda mitad del año pasado, acercándose a un equilibrio entre préstamos fijos y variables. Carmona señala que actualmente el 56 por ciento de los préstamos hipotecarios son a tipo fijo, mientras que el resto son variables, en comparación con el año 2022, donde los préstamos fijos superaban el 70 por ciento.
Video explicando la bajada de hipotecas en Córdoba.
Vídeo hablando del aval a jóvenes.
